El salón es en una de las habitaciones en las que más dinero se invierte normalmente. Esto es debido a que es la estancia central de la casa y tiene que tener todas las comodidades necesarias para los miembros de la familia. Si el salón es el centro de la casa, el sofá es el rey del salón. Como todo rey debe tener unos requisitos mínimos que le hagan especial. En la antigüedad, este tipo de mueble destinado al confort era solo para las clases altas. En la actualidad hay muchas variedades y para todos los públicos, y aunque varíe la versión, siempre mantiene su forma en ‘L’.
Entre los tipos de sofás que puedes encontrar en el mercado, el más elegante y cómodo es probablemente el chaise longue. Este término proviene de Francia y su significado literal es sillón largo. Empezó sobre el siglo XVII en Francia siendo una especie de butaca en la que se podían estirar los pies, tipo diván de psicológo. Aunque no se tiene muy claro su año de aparición, se relaciona con el reinado de Luis XV. Si es cierto que hay retratos de chaise longue en Pompeya con Cleopatra reclinada en algo semejante.A éste le han seguido los modulares. Éstos son una versión del chaise longue. En vez de ser una pieza o dos a lo sumo, son varias en forma de cuadrado normalmente. Hay que destacar de esta butaca que no tiene respaldo en uno de los lados, concretamente en la base de la ‘L’. Si te has decidido por comprar uno, debes saber que con tenerlo en tu salón, ya habrás dado un toque de distinción a la estancia.
A diferencia de los que van por módulos, se necesita un espacio grande para poder colocarlo. Un salón pequeño no quedará bien con un sofá de estas dimensiones. Para que te hagas una idea, necesitarás mínimo una zona de unos 2′50 por 2′30 metros. Aunque también puedes mirar en el mercado otros tamaños, puesto que al estar de moda, hay posibilidad de que lo encuentres más pequeño.
Fuente: http://hogar.pisos.com/el-chaise-longue-o-cheslon/9566/
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